Transformación Cultural en SSO: El Camino hacia la Excelencia y la Integración Organizacional

En muchas empresas, la salud y seguridad ocupacional (SSO) se ve como responsabilidad exclusiva del área HSE o del supervisor. Sin embargo, para que sea efectiva, debe existir un enfoque integrado, donde todos los niveles —directores, gerencia, supervisores y trabajadores— actúen bajo una misma política.

    Este enfoque parte de la convicción de que los accidentes son prevenibles. Cada trabajador debe tener autoridad para detener actividades riesgosas, y la seguridad debe ser parte esencial de la excelencia operacional. Los líderes deben promover comportamientos seguros y respaldarlos con recursos.

    Solo mediante responsabilidad personal y colectiva se construye una cultura sólida, donde la seguridad no es una prioridad más, sino la única forma legítima de operar. No se trata de “la seguridad es primero”, sino de “solo podemos trabajar de forma segura”. Las prioridades cambian, pero los valores inmutables garantizan que cada persona sea el mayor activo de la compañía.

La importancia de la integración de la responsabilidad en SSO

Cuando gerentes, supervisores y trabajadores comparten una visión común sobre la importancia de la seguridad, se crea una cultura integrada de la seguridad que trasciende los procedimientos. Esto se traduce en:

  • Menos accidentes y enfermedades laborales
  • Mayor cumplimiento normativo
  • Mejora en la productividad
  • Mayor compromiso del personal

El rol de cada actor

Gerencia: Debe liderar con el ejemplo. Su compromiso se refleja en decisiones estratégicas, asignación de recursos y comunicación clara. Cuando la gerencia asume que solo se puede trabajar de forma segura, y que no hay otra manera de hacer las cosas, el resto de la organización imita inicialmente, y luego asume esa responsabilidad como propia.

Supervisores: Son el puente entre la estrategia y la operación. Deben conocer los riesgos, así como los procedimientos seguros, fomentar el reporte de condiciones inseguras sin represalias, así como abogar por el personal operativo ante la gerencia cuando las condiciones de trabajo presenten riesgos inaceptables a la salud o seguridad de los trabajadores.

Trabajadores: Son quienes enfrentan los riesgos directamente. Su participación, conocimiento de los procedimientos, disposición para reportar incidentes y su voluntad para negarse a trabajar cuando las condiciones sean realmente inseguras son esenciales.

Cuando los trabajadores detienen labores con mayor frecuencia que los supervisores ante condiciones inseguras, se evidencia una situación típica en la que la cultura de seguridad aún no ha sido plenamente integrada en los niveles gerenciales y de supervisión. En contraste, el personal operativo ha recibido una formación adecuada que les permite identificar riesgos y actuar preventivamente. Esta brecha revela la necesidad de fortalecer el compromiso de los mandos altos y medios, asegurando que la seguridad sea una responsabilidad compartida y no delegada exclusivamente al nivel operativo.

 Estrategias para lograr la integración

  • Capacitación continua: Adaptada a cada nivel, desde liderazgo hasta operativos. La capacitación será eficaz en la medida en que todos los niveles conozcan los riegos, aunque no es recomendable que asistan todos a las mismas sesiones de capacitación.
  • Comunicación clara y bidireccional: Que permita escuchar y responder a inquietudes.
  • Reconocimiento y refuerzo positivo: Premiar buenas prácticas de seguridad.
  • Indicadores compartidos: Que todos conozcan y trabajen por los mismos objetivos de SSO.
  • Tecnología de apoyo: Sistemas que faciliten la trazabilidad de certificaciones, reportes y cumplimiento.

Construyendo una cultura integrada de la seguridad y salud en el trabajo.

La integración no se logra de un día para otro. Requiere constancia, liderazgo y participación de todos los actores. Pero cuando se alcanza, la seguridad deja de ser una obligación y se convierte en un valor compartido que abarca todos los espacios de la compañía, el personal en cargos de gestión verá con absoluta responsabilidad a los trabajadores, los trabajadores verán con sincero respeto a quienes se han esforzado por crear un ambiente seguro de trabajo. Los supervisores podrán hacer su trabajo sin presiones que fomenten prácticas inseguras, y sin recriminaciones del personal a su mando.

Ante los beneficios de una cultura integrada y generativa de la Seguridad y Salud Ocupacional en una compañía no hay esfuerzos que sean suficientemente

Este artículo fue escrito por:

José María Peña

Líder de Capacitaciones de ITS Consultants.

jose.pena@itsconsultantsinc.com